Voluntariado
“Al final, solo se tiene lo que se ha dado”
– Isabel Allende

Pocas satisfacciones igualan a la de ayudar a otra persona, acompañarla, compartir su carga y entregar nuestro tiempo y energía sin esperar nada a cambio.
El voluntariado se define como el conjunto de personas que en el marco de la organización fundacional se comprometen de forma libre y desinteresada a colaborar con proyectos y actividades de la Fundación con el objetivo de contribuir a la mejora de la salud y el bienestar de las personas.
Del mismo modo, es nuestra responsabilidad proporcionar la formación adecuada para garantizar una buena actuación. La experiencia voluntaria busca ser un intercambio. El voluntario aporta su trabajo, su entusiasmo, su tiempo, habilidades y experiencia mientras que, la Fundación le ofrece recursos, formación, apoyo y seguimiento, así como un seguro como parte de su convenio de voluntario. Una colaboración en la que cada parte da lo mejor de sí, buscando el mayor beneficio de los destinatarios.
El voluntariado puede ser asumido por cualquier persona que de forma altruista, solidaria, libre y comprometida decida participar como voluntario de la Fundación Vivo Sano. Debido a las característica de nuestros proyectos, consideramos adecuado que el futuro voluntario reúna las siguientes características:
- Ser mayor de 18 años.
- Cualidades personales: paciencia, capacidad de escucha y observación, espíritu de servicio, entendimiento, receptividad, aceptación de limitaciones, empatía, tolerancia, solidaridad, mentalidad abierta…
- Tener un buen nivel de responsabilidad y compromiso, lo que incluye poseer de tiempo libre para cumplir con las tareas de voluntariado a las que se comprometa.
- Estabilidad y madurez. Conocimiento y aceptación propia.
- Optimismo, buen humor, creatividad y entusiasmo.
- Actitud no protectora. Fomentar la autonomía de los otros.
- Capacidad de trabajo en equipo.
- Confidencialidad, discreción y prudencia con la información facilitada. Consciencia del secreto profesional.
- Estar familiarizado con la ideología de la institución y las reglas del voluntariado.
Y, sobre todo, ¡simpatía genuina por el proyecto y ganas de ayudar!
Son derechos del voluntario:
- Ser tratados sin discriminación, respetando su libertad, dignidad, intimidad y creencias.
- Obtener el respeto y reconocimiento por el valor social de su contribución.
- Recibir tanto, con carácter inicial como permanente, la información, formación, orientación, apoyo y, en su caso, medios materiales necesarios para el ejercicio de las funciones que se les asignen.
- Participar activamente en la organización en que se inserten, colaborando en la elaboración, diseño, ejecución y evaluación de los programas, de acuerdo con sus estatutos o normas de aplicación.
- Ser asegurados contra los riesgos de accidente y enfermedad derivados directamente del ejercicio de la actividad voluntaria, con las características y por los capitales asegurados que se establezcan reglamentariamente.
- Realizar su actividad en las debidas condiciones de seguridad e higiene en función de la naturaleza y características de aquella.
- Ser reembolsados por los gastos realizados en el desempeño de sus actividades.
- Disponer de una acreditación identificativa de su condición de voluntario.
Son deberes del voluntario:
- Cumplir los compromisos adquiridos con la Fundación, respetando los fines y la normativa de las mismas.
- Guardar, cuando proceda, confidencialidad de la información recibida y conocida en el desarrollo de su actividad voluntaria.
- Rechazar cualquier contraprestación material que pudieran recibir bien del beneficiario o de otras personas relacionadas con su acción.
- Respetar los derechos de los beneficiarios de su actividad voluntaria.
- Actuar de forma diligente y solidaria.
- Participar en las tareas formativas previstas por la organización de modo concreto para las actividades y funciones confiadas, así como las que con carácter permanente se precisen para mantener la calidad de los servicios que presten.
- Seguir las instrucciones adecuadas a los fines que se impartan en el desarrollo de las actividades encomendadas.
- Utilizar debidamente la acreditación y distintivos de la organización.
- Respetar y cuidar los recursos materiales que pongan a su disposición la Fundación.